Oliveros desbordó Pasión. Cientos de personas disfrutaron con la salida de la hermandad a la calle. Uno de los principales estrenos de la cofradía fue el recorrido que le llevó por Artés de Arcos y Carrera de los Picos para acercarse a la feligresía. La Virgen de los Desamparados portaba en su mano la flor de la pasión restaurada y bañada en oro
El barrio de Oliveros vive de una manera intensa el Lunes Santo. A las seis de la tarde salía la hermandad del barrio, la Hermandad de Pasión, desde el templo de Santa Teresa de Jesús. El paso marcado por la cruz guía junto con dos faroles portados por nazarenos. La Banda de Cornetas y Tambores Monte Calvario de Martos en Jaén, interpretaba la Marcha Real, seguida de ‘La Pasión’, con la que el Señor de Oliveros dejaba atrás su templo buscando las calles de la capital almeriense. Es la primera vez que esta banda realiza estación de penitencia junto a la hermandad de Pasión. La Señora de Oliveros bajaba la empinada cuesta que caracteriza la entrada y salida de esta parroquia, al son de ‘Reina de los Desamparados’, interpretada por la Banda de Música Santa Cecilia de Sorbas, dejaba atrás su templo. María Santísima de los Desamparados portaba en su mano la recién restaurada y bañada en oro flor de la Pasión. Además, la candelería iluminaba su rostro y un gran exorno floral formado por jarras rosas blancas y rosas de pitiminí.