Todos los hogares de Almería tendrán agua desalada en sus grifos en el verano de 2023. En la actualidad, la Junta y el Ayuntamiento trabajan en la conexión de los depósitos de La Pipa y San Cristóbal con el objetivo de alcanzar este hito cuanto antes.
Estas tuberías conectarán los depósitos de La Pipa y San Cristóbal y permitirán que el agua de la desaladora, obtenida directamente del mar, llegue a nuestros hogares el próximo año. Las obras de construcción de esta infraestructura hídrica llevan siete meses en marcha y se encuentran ya al 23 por ciento de ejecución.
Se trata de un importante proyecto de ingeniería que desplegará 9,4 kilómetros de tubería a lo largo de la ciudad. De ellos, ya se han instalado 4,3 kilómetros y se ha procurado entorpecer lo mínimo posible el tráfico rodado y el día a día de los vecinos.
El objetivo es ofrecer agua de calidad y sostenible para paliar los problemas de abastecimiento presentes y futuros. Además, se evitará la sobreexplotación de los Pozos de Bernal al obtener el agua directamente del mar.